sábado, 18 de mayo de 2013

Me regalas una que otra
inquieta mirada,
una que otra
sencilla palabra.

Yo envuelvo tu sonrisa
como hilo
y lo ato a un alto
estandarte, en tu cabello
en mi cabello,
y me refiero a tus ojos, como dos almendras,
como hojas de paz,
porque pienso
en tus labios, como pétalos
de una rosa.

Caminemos, oigamos susurros susurrar
deja el suelo bese tus pies
y en un charco pisa el cielo,
antes que se derrita
como en la lluvia se derrite Dios
y abrígate, hace frío
que no te vengan las agonías
a reclamar,
venga te prometo yo cuidar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Qué tal?